Allá por 2013, Jose y Manolo, Manolo y Jose, decidieron dar un salto al vacío y dejar de soñar con el BAAM para empezar a dirfrutarlo. Desde entonces, algunas cosas han cambiado, pero la ilusión de ofrecer a sus amigos un lugar donde poder charlar, relajarse y disfrutar de unos buenos cócteles, sigue intacta. ¿Nos acompañas? Esperamos que te sientas como en casa